Viajar es una experiencia enriquecedora, cuando lo haces, conoces más sobre el mundo, las culturas, la gastronomía y costumbres de las diferentes partes del planeta. Cada país tiene un encanto en particular, en México encontras la cultura azteca y los mariachis, en Francia la gastronomía, en Inglaterra su cultura imperial, en Estados Unidos la innovación y tecnología y así sucesivamente.
Planificar un viaje no es tarea fácil, si solo se buscan las excusas y los problemas, en lugar de ver el lado positivo y lo que te suma para tu vida. Partiendo de que quieres planificar un viaje por voluntad propia, es decir vacaciones y no por algo laboral, debes enfocarte en administrar tus recursos para este objetivo, por ejemplo, si tu meta es viajar una vez por año, debes de seleccionar el destino que quieres visitar y a partir de ahí hacer tu plan financiero.
Después que has elegido el destino al que quieres ir, debes poner tope al presupuesto que utilizarás en este viaje, no puedes dejarlo de forma abierta, porque encontraras artículos interesantes y/o lugares para visitar y veas todas las cosas nuevas, vas a querer comprar muchos de los artículos o entradas para disfrutar eventos y a tu regreso solo te quedaran muchas cuentas por pagar.
Ya tienes el destino y el presupuesto general para el viaje, lo que sigue es detectar las fuentes de ingresos que te van a proveer los recursos para cumplir este objetivo, tales como, tu sueldo, el sueldo de tu pareja, bonos, etc. Identificando las fuentes de ingresos y restando tus compromisos mensuales de pago alquiler/hipoteca, servicios básicos, alimentación, etc. Sabrás cuál es tu balance final y el saldo que te queda; si tu balance es muy bajo como para destinar un monto en específico que te de para cubrir en 12 meses el dinero del viaje, debes reducir tus gastos, empezando por los gastos hormiga.
Recuerda que los gastos hormiga son esos gastos que se llevan cerca del 30% de tus ingresos y son cosas como refrescos, cigarros, café, golosinas, etc. Si consigues disminuir a la mitad esos gastos, tendrás un excedente en tu presupuesto familiar o personal del 15% aproximadamente, lo que es bastante bueno para completar los ahorros e irte de vacaciones.
Con estos pasos ya estás listo para empezar la planificación de tu viaje y poder disfrutar unas buenas vacaciones ¿Te animas a hacerlo?